viernes, 22 de octubre de 2010

"El secreto de las Aguilas"

Por: Pastor: Pedro Martinez Hoil  (Iglesia Bautista "Nueva Vida")


El águila es el ave con mayor longevidad. Llega a vivir 70 años, pero para llegar a esa edad, a los 40, debe tomar una seria y difícil decisión.


A los 40 años, sus uñas están encurvadas y flexibles y no consigue tomar a sus presas de las cuales se alimenta. Su pico largo y puntiagudo, se curva, apuntando contra el pecho. Sus alas están envejecidas y pesadas y sus plumas gruesas. Volar se hace ya tan difícil! Entonces, el águila tiene solamente dos alternativas: morir o enfrentar un doloroso proceso de renovación que durará 150 días.


Ese proceso consiste en volar hacia lo alto de una montaña y quedarse allí, en un nido cercano a un paredón, en donde no tenga la necesidad de volar. Después de encontrar ese lugar, el águila comienza a golpear su pico en la pared hasta conseguir arrancarlo.


Luego debe esperar el crecimiento de uno nuevo con el que desprenderá una a una sus uñas. Cuando las nuevas uñas comienzan a nacer, comenzará a desplumar sus plumas viejas. Después de cinco meses, sale para su vuelo de renovación y a vivir 30 años más.


Situaciones parecidas nos suceden a lo largo de la vida.


Los seres humanos nos parecemos en eso a las águilas
Los días de nuestra edad son setenta años. Si en los más robustos son ochenta años, con todo, su fortaleza es molestia y trabajo, porque pronto pasan y volamos” (Salmo 90.10)”.[1] .
Aproximadamente a los 40 años de edad, sobre todo el varón es frecuente que entre en crisis, algunos lo han llamado la “segunda adolescencia” otros “la crisis de los cuarenta”, en fin, que más o menos a lo que sería la mitad de su vida debería hacer un alto, reflexionar en todo lo que ha vivido hasta entonces y cambiar lo que tenga que cambiar para reiniciar y estar listo para unos 30 o 40 años más, los cuales físicamente serán los más difíciles, cansados, pues es cuando generalmente la vida empieza a pasar la factura de todo lo que se hizo durante esos primeros 40 años.
Pero interiormente no es así, es allí donde se requiere la renovación.
Si has llegado a esta edad y sientes que deberías hacer algunos ajustes en tu vida, llámese sentimental, espiritual, trabajo, familia, etc. es momento de hacerlo y si aún ya lo has rebasado sin haber hecho esa renovación seria, nunca es tarde para hacerlo.
Recuerda que somos tan jóvenes como lo seamos en lo interior, aunque externamente nuestro cuerpo envejezca cada día más.
Las águilas se renuevan a la mitad de su vida y físicamente estan listas para emprender un nuevo vuelo.
Los seres humanos deberíamos seguir ese ejemplo pero en un rejuvecimiento interior
Solo así podremos desprendernos de esas viejas uñas y plumas para continuar un vuelo de renacimiento y de victoria. Y ¿cuáles son esas plumas y uñas de las que tenemos que desprendernos?. Pues, cada uno puede identificarlas fácilmente en sus vidas: son aquellas actitudes, vicios y costumbres que nos impiden el cambio, que nos atan al pasado, a la mediocridad a la falta de ánimo para empezar la lucha.
En otros puede tratarse de resentimientos, complejos, baja o alta autoestima, que nos nublan la vista y la capacidad de ser objetivos con nosotros mismos. Debemos desprendernos de costumbres, tradiciones y recuerdos que nos causan dolor. Solamente libres del peso del pasado podremos aprovechar el resultado valioso que una renovación siempre trae.
Es interesante descubrir en la Biblia, que ya el salmista (aprox 800 años antes de Cristo) conocía el secreto de las águilas y refiriéndose al perdón que Dios ofrece y la renovación espiritual del hombre dice:
“Él es quien perdona todas tus maldades, el que sana todas tus dolencias, el que rescata del hoyo tu vida, el que te corona de favores y misericordias, el que sacia de bien tu boca de modo que te rejuvenezcas como el águila”(Salmo 103.3-5). [2]


[1]Reina Valera Revisada (1995) Bible Text. 1998 . Sociedades Biblicas Unidas: Miami
[2]Reina Valera Revisada (1995) Bible Text. 1998 . Sociedades Biblicas Unidas: Miami